Speaker
Description
Introducción y objetivo
La Termografía Infrarroja, permite registrar el mapa de temperaturas de la piel, de manera inocua, rápida y sin contacto con el paciente. Detecta las asimetrías que se producen en la microcirculación cutánea cuando existen procesos inflamatorios, infecciosos, vasculares...que alteran su distribución. Por estas razones, su uso resultaría especialmente útil en población pediátrica, y en patologías que alteran la vascularización periférica. El objetivo de este trabajo es realizar una correlación descriptiva entre las imágenes obtenidas mediante técnicas convencionales y mediante Termografía Infrarroja en diferentes patologías pediátricas.
Material y métodos
Se realizó un estudio prospectivo descriptivo en 6 niños (2 anomalías vasculares, 2 complicaciones de catéteres y 2 óseas) atendidos en el Hospital Clínico Universitario de Valencia. Se realizaron los controles rutinarios y las técnicas de imagen convencionales cuando estaban indicadas, y además se complementó la valoración con imágenes termográficas. El registro de las imágenes termográficas se realizó con cámara Flir E60, siguiendo el protocolo estándar, adaptado a población pediátrica. Los parámetros termográficos fueron: emisividad: 0,98, distancia: 1 metro, temperatura ambiente: 24°C y humedad ambiente: 50%. El análisis de las imágenes se realizó con el programa ThermaCAMResearcher Pro 2.10, determinando temperatura media (TM), máxima (Tmáx) y mínima (Tmín) de las regiones de interés (ROIs): zona afecta, sana y referencia (frente). Se realizó valoración cualitativa de las imágenes termográficas y cuantitativa, mediante el cálculo de un Índice Térmico ((IT= (TM ROIafecta – TM ROIsana/TM frente) x 100)
Resultados
En las imágenes termográficas se apreció cualitativamente y cuantitativamente (IT) asimetría térmica entre la zona patológica y la contralateral sana, mayor al diagnóstico que tras la administración de tratamiento, cuando la evolución fue favorable. Las imágenes termográficas se correlacionaron con las pruebas complementarias rutinarias y con la evolución clínica del paciente. Ejemplos de hemangioma infantil en Figura 1 y de celulitis de catéter de derivación ventrículo-peritoneal en Figura 2.
Conclusiones
La Termografía Infrarroja aporta información relevante para el diagnóstico y seguimiento de pacientes pediátricos con patologías que alteran la vascularización periférica, ya que es capaz de identificar incluso hallazgos que pasan inadvertidos en la exploración clínica, y detectar cambios en la microcirculación cutánea no detectables mediante pruebas convencionales.